Una investigación sin precedentes para recuperar la voz de un órgano del siglo XI, el más antiguo conservado de la cristiandad.
Un proyecto de
El Museo de Tierra Santa en Jerusalén conserva los restos arqueológicos de un órgano del siglo XI llevado a Tierra Santa por los Cruzados. Utilizado en la Basílica de la Natividad de Belén durante el siglo XII, es el órgano más antiguo y mejor conservado de la Cristiandad. David Catalunya y su equipo realizan el primer estudio profundo de este instrumento con el objetivo de recuperar su realidad sonora. El equipo recientemente descubrió que algunos de los tubos originales todavía funcionan, lo que significa que por primera vez en la historia moderna podemos escuchar un sonido musical medieval original sin tener que pasar por una recreación hipotética. El proyecto culminará con una réplica-reconstrucción del instrumento completo.
A pesar de su extraordinaria relevancia para la historia de la música, el órgano de Belén ha permanecido prácticamente desapercibido para la comunidad científica durante más de un siglo. Su estudio en profundidad ha comenzado sólo recientemente gracias a la iniciativa de David Catalunya y su equipo, que combina arqueología experimental, historia, ciencia, teoría musical y reconstrucción acústica. La investigación se fundamenta en un trabajo minucioso: más de 5.000 mediciones, análisis metalográficos, modelado 3D, estudios acústicos, y colaboraciones internacionales con expertos en organería histórica.